¿Qué es?
El limpiador que tiene un aroma a limón tan fresquito y rico, que no te parecerá que estás limpiando, sino perfumando tu hogar.
Cualquier superficie quedará pulcra sin necesidad de dañar los materiales de cualquier superficie de la casa, ya que está libre de lejía y desinfecta hasta un 99,9% gracias a su composición completamente natural.
Certificado Ecocert. 100 % origen vegetal.
**Este producto no está disponible para enviar fuera de la Península**
*Este producto ha cambiado de nombre, anteriormente era «Le Nettoyant Désinfectant. El fabricante ha cambiado el nombre por cambio en la normativa de venta, la formulación es la misma. El formato del producto se corresponde con la segunda imagen.
Esta es una foto de Olivia Cuidados S.L. No está permitido su uso. Todos los derechos reservados.
Formato y uso
Pulveriza sobre la superficie a limpiar y deja actuar durante 5 minutos. Limpia con una esponja húmeda. Si lo utilizas sobre objetos que posteriormente vayan a estar en contacto con alimentos, no olvides enjuagar bien con agua limpia varias veces.
750ml.
Ingredientes
>5% Agentes de limpieza no iónicos, agentes de limpieza anfóteros, Limonene Citral, Perfume, agua, alcohol, desnaturalizante, Ácido Láctico, Decyl Glucoside.
El 100% de los ingredientes son de origen natural.
Superpoderes
Porque tu hogar también necesita salir un poco de la rutina. Otro aroma… una limpieza y desinfección diferente. Te encantará. ¡Y a disfrutar de casa bonita!
Marca
Corría el año 1919 por la Bretaña francesa cuando Renald Raoul, un comerciante de ceras, estrenaba título de padre y creaba la marca Le Briochin. Su hijo, Jacques Briochin, fue llamado así como los habitantes de Saint-Brieuc en Cotes d’Armor, donde viven y fabrican los productos.
En su taller, Renald Raoul creaba detergentes y productos de limpieza para profesionales: pintores, mecánicos, artesanos, etc. Algún tiempo después, el boca a boca les ayudó y sus productos superaron la frontera Bretona, reconocidos como los productos más efectivos.
Comenzando los años 90 y en respuesta a las peticiones de los clientes particulares, ampliaron su rango al público general. Fue entonces cuando el negocio Le Briochin pasó a llamarse Jacques Briochin. Los empresarios visionarios tuvieron entonces una idea: ¿qué pasaría si Jacques Briochin acompañara a los hombres y mujeres en sus hogares? Para ello, había que estar presente en hipermercados y supermercados. ¡Y lo hicieron!
Gracias a la lealtad de los consumidores, la familia se expandió. Ahora se compone de más de una veintena de productos que respetan y mantienen impecables todas las superficies y habitaciones de nuestras casas. Desde su comienzo ofrecen productos de alta calidad que demuestran su savoire-faire y su gran tradición en el negocio familiar, en el que ya llevan varios siglos de la historia francesa.